sábado, 5 de diciembre de 2009

Novena de la Inmaculada (Día 7)

¡Oh dulcísima María, que esparciste como riquisima vid, al florecer, la más exquisita fragancia, rechazando siempre todo elemento impuro, concédenos que nunca quede nuestro corazón contaminado por el hedor de la impureza!
Ave María, Gloria...

No hay comentarios: